¿Qué es el autocuidado y cómo podemos incluirlo en nuestra rutina?
Definición y relevancia del autocuidado
Como su propio nombre indica, el autocuidado se basa en proporcionar atención y cuidado a nosotros mismos. Engloba todas aquellas actividades que nos proporcionan placer y bienestar como, por ejemplo, hobbies o hábitos saludables. En resumen, implica el cuidado íntegro de nuestra persona, incluyendo la salud física y emocional, y asegurando que nuestras necesidades como individuos sean atendidas.
Vivimos en una sociedad donde las normas culturales determinan lo que está bien y lo que está mal, lo aceptable o inaceptable. Además, también influyen nuestras propias creencias sobre lo que se espera de nosotros. En este contexto, hemos internalizado la idea de tener que estar continuamente disponibles para el resto, olvidándonos de nosotros mismos. Si reservar tiempo para cuidarnos implica no satisfacer todas las necesidades de los demás, es posible que surjan sentimientos de culpabilidad que necesitemos abordar y gestionar.
En esta misma línea, se han llevado a cabo diversos estudios para averiguar las consecuencias de anteponer las necesidades de los demás a las individuales. Los resultados revelan la importancia de priorizarnos a nosotros mismos en el cuidado personal como paso principal para brindar atención a los demás (familiares, amigos, pareja, etc.)
Ser conscientes de nuestras propias necesidades no implica ser egoístas. De hecho, dedicar un momento en el día a escuchar cuáles son nuestras exigencias o demandas y proporcionarnos cariño, se considera de vital importancia para garantizar nuestro bienestar tanto físico como emocional. Además, es fundamental tener en cuenta que la persona con la que vamos a convivir durante toda nuestra vida somos nosotros mismos y, por ello, debemos cuidarnos.
¿Cómo integrar el autocuidado en nuestra rutina?
Para promover el autocuidado es necesario adoptar una serie de actividades y prácticas saludables. A continuación, se describen diferentes técnicas de autocuidado que pueden integrarse en la vida cotidiana:
- Planificación y priorización. Establecer rutinas diarias dedicando unos minutos al día para desarrollar conductas de autocuidado como, por ejemplo, realizar ejercicio, leer o meditar. Asimismo, jerarquizar las prácticas de autocuidado en función de las preferencias individuales y cerciorarse de que se cumplen.
- Establecimiento de límites. Instaurar límites saludables con el resto de personas como, por ejemplo, negarse a hacer algo (decir no), y restringir, en la medida de lo posible, el tiempo de utilización de pantallas electrónicas preferiblemente antes irnos a dormir.
- Autocuidado físico. Practicar ejercicio físico diario como, por ejemplo, salir a pasear, realizar estiramientos o algún deporte, y elegir alimentos saludables e identificar la sensación que experimento tras la ingesta de ciertos alimentos, es decir, aprender a comer de forma consciente.
- Autocuidado emocional y mental. Dedicar un tiempo para practicar la gratitud, es decir, identificar qué momentos agradezco haber vivido a lo largo del día, establecer vínculos positivos con los otros y realizar breves descansos en el día para liberar la mente de estrés laboral.
- Mindfulness y relajación. Aprender técnicas de mindfulness o atención plena para ser conscientes del momento presente y disminuir el estrés, e incluir en nuestra rutina diaria técnicas de relajación como, por ejemplo, la respiración diafragmática o el yoga.
- Desarrollo personal. Invertir tiempo en hobbies o aficiones que nutran nuestra vida, así como leer libros o contenido educativo para aumentar nuestro conocimiento.
- Autocuidado espiritual. Invertir tiempo en desarrollar prácticas espirituales como, por ejemplo, la oración, sobre todo las personas para las que sea importante la religión.
- Gestión del tiempo. Aprender a planificar y gestionar el tiempo de forma eficaz para poder abarcar todo (trabajo, familia, amigos, autocuidado, etc.).
En definitiva, incluir el autocuidado en nuestro día a día es imprescindible para mejorar nuestra calidad de vida y bienestar, así
como cuidar del resto de forma eficaz.
